Gente de mierda

Cada vez que me encuentro con ciertas actitudes o razonamientos o ciertas maneras de actuar me indigno.
Trato de no generalizar pero a veces no lo puedo evitar...
Los empresarios (todos los que les quepa el sayo) que aumentan los productos que fabrican sin ninguna razón o solamente porque tienen dudas acerca del futuro cercano o porque les aumentan minimamente los insumos o porque sacan provecho de una situación circunstancial (medicamentos, barbijos, alcohol en gel etc. por estas épocas)... esos empresarios me parecen detestables y miserables.
Los improvisados que se ponen a fabricar barbijos porque es el negocio del momento (gracias al delirio paranoide gripal) (Son los mismos que fabrican banderitas para el mundial de fútbol, pero en ese caso no me jode tanto... he ahí quizás una contradicción... no sé, después lo pienso mejor), esos improvisados me fastidian...
Los empleados que pretenden sacar ventaja de esos improvisados, aumentando el precio de la tela para barbijos y ni siquiera siendo una decisión de los dueños, sino de los empleados mismos, esos empleados me resultan odiosos...
Reencontrarme con esta gente, reconocerlos, convivir, trabajar con ellos, trabajar para ellos, saber que están, que son muchos... me rompe soberanamente las pelotas.

2 comentarios:

Morocha dijo...

Hago mías sus palabras y sentires....

Como humanidad....vamos para atrás.
Triste.
Muy triste.

Blonda dijo...

Lo mismo se aplica para aquellos que deciden cerrar cines o parar algunos comercios, mientras los partidos de futbol se juegan sin problema. ¿ Uno es más factible que se contagie en la oficina que en la cancha? NO. Sólo que el evento deportivo es un gran negocio que no puede postergarse.


Vamos para atrás! A toda velocidad...

Besotes!